30 nov 2011

ORACIÓN POR LA FAMILIA (Madre Teresa de Calcuta)

Padre Celestial, nos has dado un modelo de vida en la Sagrada Familia de Nazaret. Ayúdanos, Padre amado, a hacer de nuestra familia otro Nazaret, donde reine amor, la paz y la alegría.

Que sea profundamente contemplativa, intensamente eucarística y vibrante con alegría. Ayúdanos a permanecer unidos por la oración en familia en los momentos de gozo y de dolor. Enséñanos a ver a Jesucristo en los miembros de nuestra familia especialmente en los momentos de angustia.

Haz que el corazón de Jesús Eucaristía haga nuestros corazones mansos y humildes como el suyo y ayúdanos a sobrellevar las obligaciones familiares de una manera santa.

Haz que nos amemos más y más unos a otros cada día, como Dios nos ama a cada uno de nosotros y, a perdonarnos mutuamente nuestras faltas como Tú perdonas nuestros pecados.

Ayúdanos, oh Padre amado, a recibir todo lo que nos das y a dar todo lo que quieres recibir con una gran sonrisa. Inmaculado Corazón de María, causa de nuestra alegría, ruega por nosotros.

Santos Angeles de la Guarda permaneced a nuestro lado, guiadnos y protegednos. 
Amén 

 

MISA POR LA VIDA


-compartimos un mail que nos llegó de Diego (cabe destacar que no es su autor)-

Estimado/a  Amigo/a:

   Te escribo para comentarte una idea y para pedirte, en caso que la compartas, que ayudes a difundirla.-
   Todos hemos conocido, en estos últimos días, una sucesión de noticias que daban cuenta de que en el Congreso de la Nación se estaban tratando algunos proyectos de ley de despenalización del aborto y que ese tratamiento se había postergado para el próximo año.-
   En ese marco, también, supimos de diversas campañas y actividades que se han llevado a cabo -y se siguen llevando-, en defensa de la vida; muchos, inclusive, tomando activa participación en aquellas. Todas esas son gestiones verdaderamente importantes, que no debemos descuidar, sino intensificar y multiplicar, pues trabajar en el ámbito de lo temporal es tarea de los laicos, es decir nuestra.-
   Ello, no obstante, no debemos ni podemos descuidar lo que nos toca hacer en el campo espiritual y como miembros del Cuerpo Místico de Cristo.-
   En ese orden es que, tal vez lo mejor, lo más efectivo y conducente al efecto de proteger la vida de las personas por nacer, es encomendársela al único que todo lo puede y que, precisamente, por su condición de Niño tiene un especial afecto por esos pobrecitos indefensos. De ahí que se me ocurrió que podemos llevar adelante una campaña simple, pero poderosa a la vez: encargar Misas pidiéndole -expresamente- al Divino Niño Jesús y a su Santísima Madre, su intervención para que en nuestra Patria no se aprueben leyes que favorezcan el atentar contra la vida de los bebés que viven en el seno materno.- 
   Si cada uno de nosotros encarga diez Misas con esa particular intención y consigue diez (o más) amigos que hagan otro tanto, en poquísimo tiempo habremos conseguido que en toda la Argentina se celebren miles, quizá decenas de miles de Misas pidiendo se nos conceda esa gracia; y ese clamor no habrá de pasar desapercibido en el cielo.-

   Así, habremos cumplido con el consejo de las abuelas que nos enseñaron aquello de: A Dios rogando y con el mazo dando.-



Gracias.